Iván Martín recrea la magia de las Noches en los Jardines de España
La Orquesta Filarmónica de Gran Canaria (OFGC), bajo la dirección de Pedro Halffter, ofrecerá su sexto concierto de la temporada de abono 2014-2015 el próximo viernes 31 de octubre, a las 20.30 horas, en el Auditorio Alfredo Kraus de Las Palmas de Gran Canaria.
Pedro Halffter, director artístico y titular de la OFGC, propone un programa titulado “Evocaciones, sueños” en el que la música del español Manuel de Falla se funde con la creación norteamericana del siglo XX representada por George Gershwin y un compositor actual de enorme trascendencia como John Adams, figura paradigmática del estilo minimalista.
El concierto contará con la actuación solista del pianista grancanario Iván Martín, que abordará Noches en los jardines de España de Manuel de Falla, magistral pieza en la que el compositor gaditano logró algunos de los momentos de mayor inspiración y refinamiento de toda su producción. Falla ofrece en esta obra de marcada influencia del impresionismo francés una serie de cuadros evocadores que llevan como títulos En el Generalife, Danza lejana y En los jardines de la Sierra de Córdoba. El piano juega un papel muy destacado en la exposición del rico diseño de las sugerentes atmósferas de la obra, donde el elemento andalucista se deja sentir con gran propiedad.
Compositores americanos de los siglos XX y XXI
La OFGC ofrece por vez primera en su temporada Harmonielehre, composición de 1985 de John Adams cuyo título rinde homenaje al célebre tratado de armonía de Schoenberg. Adams se sirve para la obra de referencias a sueños surrealistas, envolviendo los diseños rítmicos de perfil minimalista con una ambición sinfónica que entronca con el posromanticismo wagneriano.
En palabras del propio Adams, Harmonielehre nace de un período de crisis personal, “una crisis multifacética sobre la comprensión de mí mismo como artista y como ser humano, y sobre mi relación con mi propio yo musical y con la música contemporánea en general”.
Un viaje realizado a Cuba por George Gershwin en 1932 fue el origen de la Obertura Cubana que completa la velada de la OFGC. Originalmente llamada Rumba, pero rebautizada siguiendo la intención del compositor de dar una idea más aproximada de las intenciones y el carácter de la obra, la Obertura Cubana se hace eco de los cálidos ritmos del país caribeño y se llena de color con la inclusión de instrumentos de percusión locales como el bongó, las claves, el güiro y las maracas.
