2017, el año del turismo sostenible
La Asamblea General de las Naciones Unidas ha aprobado la designación de 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo. La resolución, aprobada el 4 de diciembre, reconoce “la importancia del turismo internacional y, en particular, de la designación de un año internacional del turismo sostenible para el desarrollo, para promover una mejor comprensión entre los pueblos en todas partes, conducir a que se tome una mayor conciencia de la riqueza del patrimonio de las diversas civilizaciones y llevar a una mejor apreciación de los valores inherentes de las diversas culturas, contribuyendo así al fortalecimiento de la paz en el mundo”.
“La proclamación por parte de las Naciones Unidas de 2017 como el Año Internacional del Turismo Sostenible para el Desarrollo es una oportunidad única para ampliar la contribución del sector del turismo a los tres pilares de la sostenibilidad (económico, social y del medio ambiente), así como para aumentar la concienciación sobre las verdaderas dimensiones de un sector que se suele infravalorar”, afirmó el secretario general de la Organización Mundial del Turismo, Taleb Rifai. Esta decisión se suma al reconocimiento por parte de los líderes mundiales en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible (Río+20) de que “el turismo bien concebido y bien gestionado” puede contribuir a las tres dimensiones del desarrollo sostenible, crear empleo y generar oportunidades comerciales.
Esta designación llega en un momento particularmente importante, en el que la comunidad internacional adopta la nueva Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), aprobados por la Asamblea General de las Naciones Unidas el pasado mes de septiembre. El turismo figura en las metas de tres de los ODS: el Objetivo 8: promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos; el Objetivo 12: consumo y producción sostenibles y el Objetivo 14: conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.
La OMT, pretende, siguiendo esos objetivos, impulsar cinco áreas clave: crecimiento económico sostenible; inclusión social, reducción de la pobreza y creación de empleo; eficiencia de recursos, protección medioambiental y cambio climático; valores culturales, diversidad y patrimonio; y seguridad, paz y cooperación. Ya la OMT había avanzado anteriormente en esta línea junto a la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) al aprobar la declaración conjunta sobre “Las energías renovables y el turismo en las islas” y presentado con otros socios la iniciativa “Hoteles con Consumo de Energía Casi Nulo (neZEH)”. Una apuesta clara por la sostenibilidad y las energías renovables frente a las fósiles.
Son los conceptos que defendemos. Son los elementos estratégicos que figuran en nuestro proyecto de trabajo y en ese modelo de ecodesarrollo que pretendemos para Gran Canaria en el que estamos trabajando. Queremos crear así condiciones para que el destino Gran Canaria siga siendo atractivo e insustituible cuando cambien las circunstancias y la competencia se recrudezca. Es posible que hoy tengamos más claro que hace una década cuáles son nuestras fortalezas, las que nos hacen ser el destino preferido de más de cuatro millones de turistas europeos. Pero también debemos reconocer nuestras debilidades para reducirlas y, si es posible, eliminarlas.
El gran objetivo es reforzar el liderazgo de Gran Canaria como destino de calidad. Y el procedimiento es mantener el trabajo colaborativo y participativo que dinamiza el Patronato de Turismo de Gran Canaria donde todas las instituciones públicas y los agentes privados han tenido y seguirán teniendo la posibilidad de proponer, revisar, intervenir en el diseño y ejecución de la política turística que revaloriza la posición de Gran Canaria. La elaboración del Plan Estratégico Gran Canaria 2016-2020, presentado recientemente, es la demostración de que, aunando esfuerzos, aprovechamos mejor nuestro valor añadido. Es la gran la apuesta que el gobierno de la Isla está haciendo por el desarrollo del turismo, desde la información, la investigación y la planificación.
Desde el Cabildo lideramos y promovemos una política turística en la que la promoción del destino, la cualificación de profesionales y empleados, la diversificación de la oferta y la renovación de la planta alojativa y de los espacios y equipamientos públicos juegan un papel fundamental. Que es un objetivo prioritario se hace patente con la decisión de incrementar en un 12 % el presupuesto de la Consejería de Turismo que hemos incluido en los presupuestos para 2017.
Pero no podemos confundirnos. La política turística no puede ser exclusivamente sectorial, ni parcializada. En una isla en la que el sector turístico representa el 32 % de nuestro PIB de forma directa y más del 70 % de forma indirecta, la intervención tiene que ser integral. Al turista le interesa la seguridad, la calidad medioambiental, las posibilidades de ocio, nuestro patrimonio histórico, la oferta cultural y de salud, la profesionalidad de la atención, la paz social…
Por eso decimos que la política de conservación del territorio es relevante para quienes vivimos aquí y para los que nos visitan. La definición de una apuesta decidida por la soberanía energética basada en energías limpias mejora nuestra vida y el destino turístico. La preservación de nuestro paisaje y nuestros valores culturales también es un apoyo al desarrollo turístico. La apuesta por la soberanía alimentaria estabiliza nuestra población rural, consolida nuestro medio natural y mejora la calidad de la oferta. El avance en todas las dimensiones del modelo de ecoisla que estamos impulsando va a tener en el sector turístico uno de los principales beneficiarios. Tenemos dirección, complicidad y estrategias para ganar la próxima década.
El Cabildo de Gran Canaria, en colaboración con los ayuntamientos turísticos, tiene programada una inversión para los próximos tres años que ronda los 40 millones de euros en diversas actuaciones que mejorarán y potenciarán el destino insular.
Y todo debe redundar en la creación de nuevos empleos y en la mejora de las condiciones de trabajo. Y debe abrir la posibilidad de crear trabajo para nuestros jóvenes. Nos duele especialmente que las tasas de ocupación y el desarrollo del sector no estén representando un empleo suficiente de este colectivo juvenil. Cuando tenemos la generación mejor preparada de nuestra historia no podemos permitir la fuga de profesionales muy formados o la permanencia en el paro de cerca del 50 % de nuestra población joven.
La Estrategia Integral de Turismo de Gran Canaria que acabamos de presentar orienta la promoción, influye en los factores de competitividad, prioriza la sostenibilidad y programa la intervención coordinada de las políticas públicas y la iniciativa privada. Y define 12 objetivos de referencia: aumentar el gasto del turista en nuestra isla; incrementar los ingresos totales del turismo; prolongar su estancia media; ampliar el índice de repetición; mejorar el índice de satisfacción de los visitantes; modernizar la oferta; perfeccionar la empleabilidad y crear más empleo, implantando sinergias con el empresariado: optimizar la gestión de recursos naturales y energéticos y la conciencia medioambiental; incrementar la posición de la marca Gran Canaria; equilibrar la distribución territorial del PIB turístico; perfeccionar la rentabilidad de los servicios turísticos y conservar y difundir el patrimonio natural y cultural de manera sostenible.
Estos objetivos se concretan en 6 programas operativos enmarcados en un Plan de Infraestructuras y Paisaje, un Plan Anfitrión, para conseguir un trato excelente y de calidad, un Plan de Buena Gobernanza (formación, lucha contra el furtivismo…), un Plan de Excelencia y Calidad, un Plan de I+D+i para la eficiencia, el marketing y la comercialización y un Plan de Promoción Exterior y Conectividad.
Estamos convencidos que visitar Gran Canaria significa gozar de mil oportunidades ligadas a una propuesta de desarrollo sostenible. Nuestra tarea común consiste en acercar al turista a esa experiencia y asegurar que por la satisfacción se convierta en un apasionado de nuestra Isla. Y que comparta con los grancanarios los logros de un modelo de desarrollo y de futuro en el que creo firmemente.