El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana apoya a la Fundación Canaria Umiaya para crear un portal de divulgación científica
El cardiólogo Fernando Wangüermet es el nuevo presidente de la Fundación desde el pasado 28 de octubre
El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana ha renovado su convenio de colaboración con la Fundación Canaria Umiaya para la Atención de la Muerte Súbita, para la puesta en marcha de un servidor con una base de datos de todas las mutaciones genéticas que se detectan en Canarias y la activación de una consulta online a través de la página web de la fundación.
La alcaldesa, Concepción Narváez, destacó el compromiso constante del Consistorio con el trabajo desarrollado por esta Fundación, “con la que colaboramos desde que se fundó en 2008 y de la que somos socios de honor. Somos conscientes de la importancia de su labor, a la que seguiremos contribuyendo con apoyo institucional, que se harán efectivos durante este año y el próximo”.
La colaboración por parte del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana servirá para implementar algunas de las acciones con las que la Fundación quiere seguir mejorando el servicio que presta a la sociedad canaria, como la puesta en marcha de una página web y redes sociales con las que atender a las familias afectadas. A través de la web se podrá acceder a un servidor con una base de datos de mutaciones genéticas que se encuentran en la actualidad en las Islas Canarias y sus vinculaciones con diferentes enfermedades, así como los centros hospitalarios que puedan atender a los pacientes afectados por la enfermedad del corazón y una base de datos de la bibliografía existente sobre la patología Taquicardia Ventricular Polimórfica Catecolaminérgica.
Narváez ha destacado “la extraordinaria labor que se está realizando desde la Fundación Canaria Umiaya con los pacientes afectados por esa patología junto con la creación y la organización del nuevo comité médico de asistencia. Todo ello llevará consigo la creación de las consultas online a través de la página web, ese necesario canal de comunicación que nacerá con el apoyo que le estamos prestando a la fundación”
Fernando Wangüemert Pérez, nuevo presidente de la Fundación Canaria Umiaya
En el encuentro entre el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana y la Fundación Canaria Umiaya sirvió para presentar al nuevo presidente de la fundación, Fernando Wangüemert, nombrado el pasado mes de octubre tras el fallecimiento del anterior presidente, Carmelo Pérez.
La alcaldesa Narváez dio la bienvenida a Wangüemert y le transmitió todo su apoyo para que pueda dar continuidad a la atención a los afectados por mutaciones genéticas que antes causaban la muerte súbita a muchas personas.
La Fundación Canaria Umiaya surgió en el año 2008 en San Bartolomé de Tirajana, como respuesta a un problema de salud que, durante siglos, venía produciendo muerte súbita en niños y jóvenes. La particularidad era que todos los afectados estaban vinculados a un mismo tronco familiar originario en el municipio.
El nuevo presidente de la Fundación, Fernando Wangüemert Pérez, es médico especialista en Cardiología y director médico del centro cardiológico Cardiavant, además de haber recibido varios premios de investigación, como el del Congreso de American College of Cardiology en Washington.
Una calle para Carmelo Pérez Pérez
En la misma reunión, la Fundación Canaria Umiaya destacó la encomiable labor del fundador de la organización por lo que propuso a la alcaldesa que se le diera el nombre de Carmelo Pérez Pérez a una calle en el barrio de El Tablero.
Carmelo Pérez llevó a cabo la destacada investigación genealógica iniciada en el año 1997 que determinó una estructura de la que forman parte unos 3.750 individuos pertenecientes a unas 1.320 familias, y unas 5.450 líneas genealógicas distribuidas a lo largo de 15 generaciones, desde la segunda mitad del siglo XVII.
Narváez destacó que “la constancia y el trabajo de investigación del teólogo y docente Carmelo Pérez permitió descubrir el gen causante de la muerte súbita en varias familias del sur de Gran Canaria y merece este reconocimiento. Por ello, trasladaremos al resto de todos los grupos municipales la petición de dar su nombre a una calle del municipio. El suyo fue un proyecto dedicado a la vida de otras personas y sin él no se habría avanzado tanto en la investigación genética en Canarias”.
