Alerta en San Bartolomé de Tirajana y Santa Lucía por altas temperaturas
El 112 avisa fenómeno meteorológico adverso y declara situación de prealerta y Sanidad activa aviso rojo por superar el umbral de temperaturas, con riesgo para la salud, además de activado el nivel 2 del Plan de Emergencias
La Dirección General de Seguridad y Emergencias, en base a la predicción de AEMET y otras fuentes disponibles, ha declarado la situación de prealerta por temperaturas máximas, en el ámbito territorial de Gran Canaria, zonas altas de la cumbre y la mitad sur de la isla, contemplando entre las misma a los municipios de San Bartolomé de Tirajana y Santa Lucía de Tirajana, donde está previsto calor y temperaturas máximas sobre los 36 grados.
A esta comunicación, recibida en el Ayuntamiento del municipio turístico sureño, se ha unido este jueves, también, otra de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, remitida a este Consistorio, de aviso rojo riesgo para la salud, con este tenor: “Aviso rojo por superación de temperaturas umbral desde los días 23 a 28 de agosto en los municipios de San Bartolomé de Tirajana y Santa Lucía de Tirajana, en la isla de Gran Canaria”, por lo que la citada consejería, a través de la Dirección General de Salud Púlbica, activa avisos de riesgo para la salud en distintos municipios de Gran Canaria, Tenerife, La Palma y Fuerteventura.
Además, en otro comunicado oficial se recuerda que actualmente está activado el nivel 2 del Plan de Emergencias, con el riesgo existente de incendios y los flecos del último registrado, por lo que todos los servicios de emergencia continúan en activo y vigilantes. En concreto, y desde el Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana se mantienen reuniones permanentes de la concejalía de Seguridad, con los distintos cuerpos de emergencia, realizando un seguimiento de la situación y actualizando el plan de emergencias local para estas fechas, especialmente durante el fin de semana, ante la posibilidad de que los riesgos se acumulen en algunos puntos del municipio, contando con que la población asuma su responsabilidad para evitar situaciones que perjudiquen la salud de las personas y el frágil entorno, ya bastante deteriorado por el fuego, según se señala.