El piano con el que estudiaba Alfredo Kraus se traslada a Gran Canaria
El piano con el que ensayaba Alfredo Kraus en su casa de Lanzarote será una de las primeras piezas de su legado que se trasladarán a Gran Canaria, además de sus trajes, partituras con sus anotaciones a mano y 5.000 fotografías, tras firmarse hoy el convenio que pone en marcha los trabajos para crear en su isla natal un museo que mantenga viva su figura e impulse en su nombre el canto.
El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, y Rosa Kraus, hija del tenor universal y presidente de la Fundación Alfredo Kraus, manifestaron su satisfacción por la fructificación del impulso a la iniciativa que ya el tenor manifestara en vida como uno de sus grandes deseos, no en vano “llevaba a gala” su tierra natal.
“Se trata de potenciar su conocimiento, aún más si eso es posible, y de que su figura no desaparezca del sentir de la isla”, apuntó Morales
Gran Canaria será el epicentro de las acciones que en su nombre se emprenderá, no solo la exposición y conservación de su legado, sino un sinfín de acciones que tendrán como máximo exponente un concurso internacional cuya primera edición se celebrará previsiblemente en 2017.
Para ello, la Fundación ya está en contacto con escuelas de canto de Viena, Nueva York y Madrid y tendrá como parte de su jurado a directores de teatros del mundo, de manera que además de una dotación económica, los ganadores obtengan el verdadero premio de ser promocionados, ya que serán estos directores quienes puedan incluirlos en sus programaciones.
Promocionar a los jóvenes de Gran Canaria, que está demostrando tener “un semillero de voces”, será otro de los objetivos del nuevo camino emprendido.
Un especialista en pianos
El legado que permanece en Lanzarote será el primero en ser trasladado en las próximas semanas a Gran Canaria, entre ellos el piano de cola con el que estudiaba y que será llevado directamente a un especialista, con un almacén en condiciones adecuadas, donde será tratado y afinado para que vuelva a sonar como cuando lo usaba el tenor.
El grueso de su legado se encuentra en Madrid, desde donde también será transportado a Gran Canaria. Rosa Kraus reconoció que los trajes que vistió su padre en sus actuaciones son los que le causan una sensación distinta al resto de los objetos y destacó como particularmente relevante para las nuevas generaciones poder aprender de sus anotaciones en las partituras porque dan a conocer sus inflexiones y su manera de trabajar.
“Todos los programas de todas sus actuaciones” son otra parte importante del valioso material, así como medallas y reconocimientos, críticas y los carteles de sus actuaciones en multitud de países, aunque a todo ello habrá que sumar lo que comenzará a llegar de los teatros y coleccionistas del mundo cuando conozcan que Gran Canaria tiene un museo donde serán conservados y expuestos para disfrute de isleños y visitantes.
El Cabildo, explicó el consejero de Presidencia y Hacienda, Pedro Justo Brito, está inmerso en la búsqueda de un espacio que reúna las condiciones necesarias para acoger este ambicioso proyecto y como primera opción apuntó Vegueta como el enclave idóneo.
“Alfredo Kraus es a Gran Canaria lo que Mozart a Salzburgo, y bajo esa premisa iniciamos este trabajo con mucha ilusión”, concluyó su hija.