El pleno ordinario de Tunte aprobó un amplio “paquete” de asuntos, en su mayoría de trámites
El último pleno ordinario de la corporación municipal del Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana, celebrado el pasado lunes 30 de diciembre en las Casas Consistoriales de Tunte, aprobó un amplio paquete de asuntos, en su mayoría de trámites.
Destacamos la resolución de las alegaciones contra la plantilla de personal de 2014; aprobación definitiva del presupuesto general del año próximo; revisión de los precios de los servicios de recogida de basuras y limpieza; modificación de la normativa de tráfico y tenencia de animales domésticos, y varios convenios de colaboración para la mejora y embellecimiento de rotondas.
Los temas que afectan a la plantilla, el presupuesto y el reconocimiento extraoficial de crédito suscitaron un amplio debate, al mostrarse discrepante con el grupo de gobierno los grupos de la oposición.
Respecto a la plantilla se mostraron en contra del informe técnico; de los presupuestos para 2014 consideraron que arrastraban vicios del anterior documento, y que en el tema del reconocimiento extrajudicial de créditos considera que ha habido varios en el ejercicio.
El alcalde Marco Aurelio Pérez afirmó que estos argumentos esgrimidos por la oposición “no eran veraces” y, sobre el reconocimiento de crédito, lo atribuyó a la “mala gestión de las facturas heredadas”.
Se aprobó un convenio de colaboración con la obra social de la Caja de Canarias para el programa de ayudas escolares, que tiene una dotación de 150.000 euros, destinados en lotes de 30 euros para los alumnos necesitados del municipio, y un convenio de colaboración con la Asociación Iraitza Tapones Solidarios, para la recogida de tapones de botellas de plástico, para su posterior reciclaje.
En el punto de los Asuntos de Urgencia, el alcalde planteó adoptar una serie de acuerdos en relación a los procedimientos de licitación para la explotación de hamacas, sobrillas y kioscos en Playa del Inglés y Maspalomas que, según el primer edil, urge sacar a concurso y que la oposición pidió quedara sobre la mesa, por discrepar sobre la urgencia del asunto.