El excedente inglés pone en peligro 10 millones de kilos de papas del país
El presidente de la Asociación de Distribuidores de Papas (Adipa) de Gran Canaria, Juan Luis Pulido, acusó este miércoles al consejero de Agricultura del Gobierno de Canarias, Juan Ramón Hernández, de no defender al sector de la papa en la isla de Gran Canaria.
El sector de la papa se enfrenta este año a un retraso en la recogida de la cosecha, que empezará el 15 de julio, y llegarán al mercado entre 8 y 10 millones de kilos de papa del país coincidiendo con la irrupción de un exceso de producción de la papa inglesa de importación, y en pleno verano, cuando se registra el descenso de la demanda.
Aunque el pasado 1 de julio entró en vigor el impuesto a la importación de papas (un 10 por ciento) dentro del Arbitrio sobre Importación y Entrega de Mercancías en Canarias (AEIM), los distribuidores sostienen que “esta medida no servirá para que la producción local pueda competir en precio con la importada”. En estos momentos los productores están vendiendo a unos 40 céntimos el kilo.
A medida que se recoja la cosecha y coincida en el mercado con la papa de importación, los precios bajarán por debajo de los 25 céntimos por kilo “con lo que el productor grancanario no podrá cubrir los muchos costes que ha tenido este año para producir”. “Aplicar un 10 por ciento de gravamen a una papa inglesa que viene a 25 céntimos el kilo, supone un incremento de 2,5 céntimos y eso no sirve para proteger al agricultor local. Como esto siga así llegaremos al extremo en el que están en Tenerife, que los productores locales no encuentran a quien vender las papas porque nadie las quiere”, advirtió Pulido. “Es muy triste que después de trabajar todo un año para sacar adelante la cosecha lleguen a final de mes y sin nada que echarse a la boca”, dijo.
Críticas a la Consejería regional
Pulido explicó que desde noviembre de 2013 Adipa ha pedido en distinta ocasiones la reunión de la Mesa de la Papa en la que confluyen productores, distribuidores y representantes de las administraciones. “Antes se reunía entre tres y cuatro veces al año, pero hace mucho que no se convoca. El consejero no nos quiere escuchar”, lamentó Pulido quien señaló que, sin embargo, sí han sido recibidos por el viceconsejero de Presidencia, Jorge Rodríguez, y el consejero de Economía, Hacienda y Seguridad, Javier González Ortiz. “Pero quien tiene que tomar la decisión es el consejero de Agricultura. Lo mínimo que puede hacer es reunirse con el sector”, lamentó el presidente de ADIPA.
En este contexto Pulido criticó que desde la Consejería de Agricultura se haya justificado el incremento del AIEM a la papa como una fórmula para proteger el sector cuando este mismo mes quedará demostrado que ese 10 por ciento no servirá para que la papa canaria pueda competir con la importación europea.
Explicó que la propuesta de los distribuidores, la que “no ha querido escuchar el consejero”, consistía en la aprobación de un arancel dentro del AIEM que gravara la importación, con mayor proporción si fuera necesario, en los momentos sensibles, esto es, cuando la papa autóctona llega al mercado, y que se favoreciera la importación cuando la producción local es mínima y no es suficiente para abastecer la demanda.
“Que el AIEM no sea de un 10 por ciento, sino de un 20 ó 25 por ciento, pero en los meses sensibles del año, cuando tenemos producción local suficiente para abastecer nuestro mercado. Y quedarse a cero en otros meses del año en los que no hay producción local, porque solo sirve para perjudicar a los consumidores que ven encarecer la cesta de la compra sin necesidad”, explicó.
El presidente de ADIPA manifestó la voluntad de “seguir luchando” para que escuchen las reivindicaciones del sector. “Y si no nos escucha el consejero, tendrá que escucharnos el presidente del Gobierno de Canarias”, dijo Pulido quien insistió en el compromiso de la Asociación para defender los intereses de los agricultores grancanarios, apoyándoles en cuantas medidas sean necesarias para que las producciones locales sean más rentables.