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“Isabel Santiago y su marido, Juan Manuel Gabella, solo se mueven por interés propio, su meta es mantenerse, y si de paso me hacen daño a mí y a mis compañeros mejor”

“Tengo a mis espaldas 16 años de trayectoria política, de estos, 12 he estado imputada. Desde 2007 al 2017, y desde el 2020 hasta ahora. Dos detenciones, 3 días en un calabozo y más de 20 delitos. Aunque de todas he salido absuelta y nunca se ha erigido contra mi un anuncio de acusación formal”. Con estas palabras comenzó Onalia Bueno, alcaldesa de Mogán, la rueda de prensa donde daba explicaciones de los archivos de los delitos electorales de los que se la acusaba. pretendía dar una explicación de lo que estaba sucediendo en el municipio estas últimas semanas.

La alcaldesa aclaró que contestaría a todas las preguntas, pero que antes, dejaran que diera su versión de los hechos. “Chanchullera, choriza y, si yo estuviera en el lugar de la gente, seguramente pensaría lo mismo. Por ese motivo, estoy aquí hoy. No puedo ni quiero que esa nube negra que se han encargado poner sobre mí y al grupo de Gobierno, nos siga persiguiendo aún cuando se ha archivado la causa”, explicaba la implicada.

Las palabras salen a colación de la denuncia de varias personas por la sospecha que se cierne sobre ella y su partido por una supuesta compra de votos. Según Onalia Bueno, la persecución a la que está siendo sometida tiene dos nombres: Isabel Santiago, concejala de Nueva Canarias en Mogán, y su marido, Juan Manuel Gabella, Director Insular de Industria y Comercio del Cabildo de Gran Canaria.

La polémica comenzó entre los años 2016 y 2019. Durante esa época, la Fiscalía Provincial de Las Palmas, juzgado número 1 de San Bartolomé de Tirajana recibía un total de 13 denuncias dirigidas hacia la alcaldesa, el personal del ayuntamiento y el Gobierno. La mayoría de los denunciantes eran afines al partido o allegados de Isabel Santiago(N.C.).

Onalia Bueno acusa de que, tanto Isabel Santiago como Juan Manuel Gabella, utilizaron denunciantes y testigos pantallas, algunos, muy pocos, manipulados y engañados para liderar esta denuncia. Por otro lado, la mayoría, fue cómplice de la situación, aceptando dinero por realizar este trabajo sucio, como así manifestaron en sede judicial.

“Esto no lo afirmo yo. Antonio González y José Luis Curro, ex secretario y presidente de la Asociación por la Regeneración Democrática respectivamente, organismo que durante bastante tiempo lideró la acusación por la compra de votos lo hacen”, argumenta la alcaldesa. El primero lo manifestó tras dejar su cargo en 2016, en caso de José Luis Curro, solicitando que desacreditaran todos los escritos presentados por un complot orquestado entre Juan Manuel Gabella y Francisco González.

Este último, en abril de 2015, días después de que el PP perdiera las elecciones tras 12 años en el cargo, denuncia una supuesta compra de votos por CIUCA (Ciudadanos para el cambio), portando un pen drive con conversaciones acusatorias. La Unidad Organizada de la Policía Judicial, sección segunda de Investigación Criminal del Grupo de Patrimonio de la Guardia Civil las rechazó.

“Por todo ello, esta instrucción entiende que los datos aportados en todas las conversaciones se fundamentan en rumores y comentarios existentes en el municipio de Mogán relativa a la compra de votos por parte de una o más formaciones políticas concurrente a las elecciones municipales; teniéndose en cuenta que en todas las conversaciones se atribuye la supuesta actividad ilícita a terceras personas las cuales no participan en la misma. Asimismo, queda constatado que ninguna de las conversaciones presenta indicios de haber surgido de manera espontánea, dando la impresión de que la respuesta del otro interlocutor son, en la mayoría de los casos, inducidas por Francisco González en base a sus propios intereses electorales independientes de la posible e innecesaria defensa de la legalidad vigente”, resolvía la Guardia Civil

La alcaldesa apunta que algunas personas que salían en esas conversaciones afirmaron que fue el propio PP quien había comprado los votos, pero que eso nunca se había investigado. Además, se le reprocha al señor Francisco González que, teniendo pruebas desde 2011, las haya guardado, sacándolas a la luz una vez las elecciones estaban perdidas.

La causa es archivada, pero, en 2016, aparece José Manuel Sánchez, coordinador general de la Ciudadanía Contra la Corrupción, pidiendo la re apertura del caso. Días después, Ramón Trujillo denuncia que él había recaudado fondos para CIUCA en 2015.

El señor Sánchez presentó un escrito donde aportaba audios de tres testigos sobre la supuesta compra de los votos, y documentos relacionados con la corporación, algo a lo que solo tiene acceso el personal de la propia administración local.

“Antonio González Muñoz, secretario de la Asociación por la Regeneración Democrática, presentó las mismas tres denuncias conocidas, más 4 escritas por ordenador en un formato idéntico. En ellas solicitaba la re apertura del caso. Destacar que las cuatro nuevas denuncias son interpuestas por las mismas personas que ya la habían presentado previamente”, comenta la implicada.

Unos días después, se presentó un nuevo audio, donde Francisco González reiteraba que él, en sus 12 años de mandato, nunca se había comprometido a nada, o lo que es lo mismo, que nunca compró votos, pero si comentaba que CIUCA había conseguido la financiación necesaria para poder obtener el apoyo suficiente y arrebatarle así el poder.

El audio en cuestión fue publicado en un diario digital afín a Nueva Canarias en Mogán, cuyo director ha sido denunciado en varias ocasiones por violar los derechos deontológicos de la profesión. En el, José Luis Curro relataba la reunión mantenida con González y Gabella, donde le aseguran tener pruebas de la compra de votos. Se le entregó un sobre con 500€ para sufragar los costes. Nunca vio evidencia alguna.

Antonio González dimitió tiempo después y manifestó que se había sentido manipulado por Juan Manuel Gabella. No fue el único, José Luis Curro declaro que los denunciantes habían sido pagados antes y después, y que se había llevado a un medio de comunicación nacional, La Sexta, ya que el director insular buscaba que esto trascendiera para que la justicia actuara en un caso de escasas pruebas.

El señor José Luis señaló que tenía pruebas guardas de que Gabella era el cabecilla de todo. Fueron entregadas en sede judicial en el 2017. Este supuesto complot se resquebraja cuando se vuelve a usar a asociación para interponer un escrito adjunto con diversas pruebas para reabrir el caso Góndola, operación que se inició en 2007 donde Francisco González estuvo imputado por varios delitos.

Las pruebas apuntaban a que Juan Manuel Gabella había orquestado y manipulado a diferentes personas para sacar beneficio propio. El 28 de mayo de 2020, José Manuel Fornet escribía en su perfil oficial, que Nueva Canarias era un partido de mentirosos y tramposos. Hay que destacar que Isabel Santiago, esposa de Gabella, admitió conocer a Fornet.

Las campañas electorales comienzan en el año 2019 y, según una foto mostrada durante la rueda de prensa, Ramón Trujillo, uno de los denunciantes de la compra de voto, no solo aparece en los videos de Nueva Canarias, sino que se publica una foto de él con Juan Manuel Gabella en una terraza de la zona de Meloneras.

Ese mismo año, a raíz de los informes de la Guardia Civil basados en los escritos aportados en 2015, 2016 y 2017 en el juzgado por José Manuel Sánchez y la asociación a la que representa, se toma declaración a los supuestos testigos, entre los que se encuentra Ramón Trujillo, quien acaba siendo imputado al desacreditarse testimonio.

“Es a raíz de dos informes de la Guardia Civil, uno que es entregado de forma sesgada porque no están firmadas todas las declaraciones, y otro que incluye el acto de declaración de Isabel Santiago donde, supuestamente, había aportado unos CDs con información, pero que no estos no están en la causa. El día 10 de septiembre estaba el instructor de la Guardia Civil en casa de doña Isabel, algo muy inusual para personas sin problemas de movilidad”, comentaba la alcaldesa.

El juez manifestó que no había indicios suficientes para llevar a cabo las investigaciones, y que, si la Guardia Civil quería seguir investigándolo, debía pedir la documentación el Consistorio, procedimiento que se está llevando a cabo en ayuntamientos como el de Arona, La Laguna o San Bartolomé de Tirajana, todos con alcaldes socialistas. “Se podían haber obtenido los expedientes sin montar este circo mediático. Los delitos ya estaban prescritos”, critica Onalia Bueno.

El fiscal establece que las diligencias llevabas a cabo, no acreditan ningún delito por parte de las personas imputadas. Tras 7 años de instrucción, ninguno de los testigos que ha pasado por sede judicial la ha señalado a ella o a alguien de su grupo. Onalia Bueno admite que Isabel Santiago y Juan Manuel Gabella la han acosado durante años, aumentando sus ataques con la aparición de las redes sociales.

“Isabel Santiago se mueve solo por su interés propio y el de su marido, que siendo de Sevilla, tiene un alto cargo en un partido nacionalista, y un salario mayor que el mío como alcaldesa. Su meta es mantenerse, y si de paso me hacen daño a mí y a mis compañeros mejor”, comentaba de forma tajante la alcaldesa.

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