La aprobación de la reforma de la Ley Electoral Canaria supone un avance para la democracia
Izquierda Unida Canaria (IUC) “ya proponía desde 2014” un sistema en el que se redujeran las restricciones de acceso al escaño por medio de una única barrera limitada al ámbito insular con un corte del 3% de los votos, así como un aumento del Parlamento hasta las 69 diputados a través de la creación de una circunscripción regional siempre que este aumento no supusiera un sobrecoste económico para la población. Así, la corrección de las poblaciones infrarepresentadas se produciría sin menoscabo de los escaños actualmente asignados a cada una de las islas, recuerda la formación de izquierda en una nota de prensa.
Según afirma IUC, las islas de Tenerife y Gran Canaria, que han sido las más perjudicadas por este sistema electoral injusto, incrementarían su representación y se corregiría la desproporcionalidad y desigualdad en el valor del voto de la ciudadanía, mejorando de esta manera la representación del Parlamento.
Este acuerdo, en el que se pasaría de 60 a 70 diputadas y se disminuirían las barreras quedándose entre el 3 y el 5% regional y el 15% insular, es para la formación de izquierdas un gran avance que podría resultar una verdadera democracia en los comicios de 2019. Sin embargo, desde la organización política coordinada por Ramón Trujillo se incide que este aumento representativo “no debe suponer ningún coste extra a las arcas públicas”, ya que en la actualidad, se hace muy necesario invertir gran parte del capital en políticas públicas que sigan mejorando la vida de la gente.