Jóvenes de cinco generaciones homenajean a Gerardo García Pedraja
Don Francisco Santana Marrero (Paco, el Taxista)
Era directivo del Club Deportivo Maspalomas, pero su labor fue siempre mucho más allá de las normales de un directivo cualquiera. Y es que, además de ejercer de delegado de campo, las encomiendas que le encargaba la Junta Directiva, también ponía su propio coche para traslados de los jugadores, conservaba el material, balones, etc.; compraba el agua a los jugadores, sacrificaba a su trabajo y a su familia los fines de semana…. etc.
Martín Guillén Jiménez (a título póstumo)
Llegó a Maspalomas procedente de Sardina del Sur y de la mano de Roberto Rivero. Representa a los preparadores y entrenadores pero, al igual que Paco, su labor siempre fue más allá de las exclusivas de un entrenador, llegando a ser casi padre, confesor y amigo de los jugadores. Marcó un antes y un después entre los jóvenes de la época y, prueba de todo ello es que echó raíces y se quedó en Maspalomas. Fue además el primer entrenador del Juvenil Nacional de Maspalomas.
Tanto uno como otro, encaminaron a un sinfín de niños y jóvenes en una época difícil de transición social y cultural en que los valores humanos estaban cogidos con papel adhesivo. Y todo ello a través del deporte de equipo, de la amistad, de la camaradería.
Estos son los homenajeados de este acto y en este momento, pero esta labor era la que ejercían tantos y durante tanto tiempo; don Gerardo, Paco el Taxista y Martín Guillén van a servir de disculpa o de hilo conductor para que el trabajo y la dedicación de todos sea también reconocido.
Pero es que la cosa no acaba aquí, este homenaje tiene un “ida y vuelta”, pues también se “autohomenajean” unas cinco generaciones de jóvenes que si un día fueron niños, luego fueron galletones, más después fueron padres y, ahora, algunos ejerciendo de abuelos, tratan de implicar a sus hijos y nietos en la noble tarea del fútbol…, del deporte…, de la vida sana.
Y, lo que más llama la atención es que son precisamente los jugadores los que, de manera espontánea, sin ser dirigidos ni coordinados por nada ni por nadie; mediante Wasap y todas las redes sociales, se han autoconvocado, para llevar a cabo este, repetimos, “Acto de Humanidad y Agradecimiento”.
Por cierto, por encargo de algunos de ellos, todos los que se sientan partícipes o simpatizantes de esta iniciativa, aún están a tiempo de abonar la cantidad que se ha estipulado para asistir a esta “Cena-Homenaje”, en el Restaurante Aeroclub, el sábado, día 9 de noviembre, a las 19:00 horas.
Pedro José Franco López
pedrojosefrancolopez.blogspot.com.es
