Los viñedos: contribuyentes a la prevención de grandes incendios forestales
- El proyecto Gran Canaria Mosaico destaca la labor de Bodegas Frontón de Oro en la creación de un paisaje resistente al fuego
- Morales subraya que los productos locales “vienen de campos de cultivos y zonas pastoreadas que son magníficos cortafuegos”
Gran Canaria, 6 de febrero de 2024. El Cabildo, a través de la Consejería de Medio Ambiente Clima, Energía y Conocimiento, destacará mensualmente con el galardón Gran Canaria Mosaico la labor de personas y entidades del mundo rural que con sus actividades agrícolas, ganaderas y forestales contribuyen a la creación de un paisaje resistente a los grandes incendios forestales.
El primero de esos reconocimientos ha sido para las bodegas Frontón de Oro como símbolo de los viñedos de Gran Canaria “por crear un paisaje diverso y preparado para detener el avance de los incendios”, comentó el presidente insular, Antonio Morales, quien recordó que cada vez que se consume producto local, “además de contribuir al desarrollo económico de Gran Canaria, estamos ayudando a la prevención de grandes incendios forestales”.
Acompañado de los consejeros de Medio Ambiente, y de Sector Primario y Soberanía Alimentaria, Raúl García Brink y Miguel Hidalgo respectivamente, así como del alcalde de San Mateo, Alexis Ramos, el presidente insular consideró “grandes aliadas” en la prevención de los incendios forestales a “las bodegas, queserías y las pequeñas explotaciones agrícolas de nuestras cumbres y medianías” cuyos productos “vienen de campos de cultivos y zonas pastoreadas, que son magníficos cortafuegos”, señaló Morales.
Un paisaje mosaico es aquel donde conviven diferentes tipos de bosques y naturaleza con sembrados o pastos y donde cada una de estas piezas pone obstáculos al fuego, que se propaga más lento y hace posible sofocarlo.
Así, a lo largo del año el Cabildo reconocerá mensualmente a una persona o entidad que represente a cada una de las piezas clave de ese conjunto paisajístico y medioambiental y que contribuye con su labor a convertir Gran Canaria en un territorio preparado antes los grandes incendios forestales.
Diseñar y promover “esta relación de colaboración mutua entre la conservación de la naturaleza y el mundo rural está en el corazón de lo que desde el Cabildo se denomina ecoísla, un proceso de transformación sostenible de nuestro modelo de crecimiento, que se sustenta en la soberanía energética y alimentaria, en la seguridad hídrica y en la mitigación y adaptación al cambio climático”, recalcó el presidente.
El entorno de La Lechuza, en San Mateo, donde se encuentra esta bodega, representa a la perfección las diferentes piezas que explican visualmente el concepto de paisaje mosaico resistente a los incendios. En ese rincón de la isla, entre el núcleo habitado y el pinar, se encuentran campos cultivados, bosque de castaños, una loma pastoreada y, enfrente, los viñedos.
De hecho, tal y como señala Didac Díaz, coordinador técnico del proyecto Gran Canaria Mosaico de la Consejería de Medio Ambiente, en el último incendio de Tenerife “los equipos de extinción de Gran Canaria pudieron frenar varios frentes importantes apoyando sus maniobras en campos de cultivo y en viñedos”, lo que da muestra de la importancia que tiene el paisaje en la prevención y extinción de incendios forestales.
Frontón de Oro es una bodega con solera, con más de dos décadas en el mercado grancanario, que produce cada año unas 80.000 botellas con las uvas que cosecha en más de 10 hectáreas ubicadas en la zona de Camaretas y La Lechuza, en San Mateo. Desempeña su actividad en el mercado local, pero tiene en la exportación una de sus principales vías de negocio, con un tercio de su producción destinada al mercado estadounidense, donde ha obtenido importantes reconocimientos.
“Queremos aprovechar este acto para que nos demos cuenta de que el medio rural y el medio ambiente son dos piezas que están destinadas a encajar, y que su unión no solo favorece a las personas que vivimos en el campo sino también a toda la comunidad ya que tenemos un objetivo común, que es disfrutar de estos maravillosos paisajes que nos rodean y hacerlos sostenibles en el tiempo”, subrayaron dos jóvenes integrantes de la familia propietaria, Kira Ramírez Martel y Alejandro Rodríguez González, quienes recogieron el reconocimiento en un guiño a la continuación de la tradición.
Precisamente, Gran Canaria acogió el pasado octubre la presentación de la ‘Declaración sobre la gestión de grandes incendios forestales en España’, impulsada por la Fundación Pau Costa con el consenso de más de 60 expertos de la comunidad de incendios forestales de toda España, en la que se insta a potenciar un mundo rural con un sector primario ambientalmente sostenible y a fomentar el consumo de producto local, entre otras medidas.
Gran Canaria Mosaico promueve, entre otras acciones de prevención de incendios forestales como el pago por servicios ambientales a pastores, la recuperación de un paisaje mosaico diverso, vivo y con menor riesgo basado en la convivencia de los espacios naturales con las actividades agrícolas, ganaderas y forestales y la adaptación de la sociedad para convivir con el fuego.