NC secunda las alegaciones de los empresarios de Playa de Mogán y advierte de desviación de poder en el procedimiento
Nueva Canarias (NC) Mogán registraba ayer ante las oficinas municipales de Arguineguín, y ante la Delegación del Gobierno las alegaciones contra el expediente de aprobación de la Ordenanza Municipal provisional área de ocio y esparcimiento de Playa de Mogán.
Según la formación nacionalista, del escrito de alegaciones la tramitación del expediente ha omitido el trámite de desafección del suelo ocupado por el acuario, cedido en un pleno de 1986 para la instalación de un acuario. Este hecho supone que para cambiar el uso del suelo, y destinarlo a la construcción de otras infraestructuras, como paso previo, debería haber sido desafectado.
Para NC, el procedimiento escogido adolece de motivación de las razones extraordinarias y de necesidad pública o de interés social urgente que motiva la actuación para recalificar el uso urbanístico vigente de las parcelas, y que motive el uso de las ordenanzas provisionales del art. 154 de la Ley del Suelo como instrumento de ordenación urbanística. Lo correcto habría sido recurrir al procedimiento ordinario de modificación menor del planeamiento, no existiendo informe emitido por funcionario objetivo, imparcial e independiente con arreglo a los razonamientos expuestos, pues solo consta como justificación de este expediente un informe de la propia alcaldesa, carente de la objetividad y el revestimiento de legalidad que sólo aportan los funcionarios.
Desde NC se ha advertido en el escrito de alegaciones que “se incurre en una evidente desviación de poder”, pues se utiliza el ordenamiento jurídico con la única finalidad, no disimulada, de atribuir uso recreativo y comercial en régimen de tolerancia total sobre rasante de las parcelas con una altísima edificabilidad de 0,24 m2/m2, que pone en riesgo el carácter dotacional de las parcelas, de acuerdo al destino de parque urbano propuesto, sin explicar adecuadamente las razones que concurren para ello, dada la alta saturación comercial de la zona. Así mismo no se justifica, el uso proyectado como aparcamiento bajo rasante, cuando ya existe un gran aparcamiento en la misma zona sin que se aporte estudio de movilidad alguno que justifique la creación de nuevas plazas, ni se haya definido la forma de gestión con arreglo a la Ley de Bases de Régimen Local.
Para NC esta circunstancia es de una gravísima importancia, pues la edificabilidad y el uso comercial, a razón de 250 m2 comercial por cada 1.000m2, supone que podría construirse hasta un cine, o locales comerciales, pasando por alto la saturación que en estos momentos sufre la zona, postura que mantiene el propio Ayuntamiento a través de un informe de diciembre de 2008, y que es mas que evidente si se tiene en cuenta el centro comercial a medio hacer en la entrada de Playa de Mogán y en el construido cerca del hotel Cordial, y que a penas alberga actividad económica alguna. Por lo que desde NC, se rechaza la ampliación de suelo comercial en Playa de Mogán, ademas de por lo expuesto, por el grave perjuicio que ello supondría para los empresarios de la zona.
Asimismo, NC sostiene que el trámite elegido por el Ayuntamiento para sacar adelante este proyecto, que carece del suficiente respaldo social, colisiona con las normas subsidiarias de Mogán, que no permiten que una zona verde, o espacio libre, tenga un uso comercial, así se pronuncia el art. 5.37 de dicho cuerpo normativo. En este sentido, no vale aludir a que el Plan de Modernización es una normativa de planeamiento superior a dichas normas, pues estas se encuentran plenamente vigentes, dada la nulidad, judicialmente acreditada, de dicho plan de modernización.
Por otro lado, desde NC se cuestiona la idoneidad del derribo del acuario por varias razones. Por un lado señala, en su escrito de alegaciones, que el expediente carece de un informe que fundamente y justifique que la mejor opción es proceder a la demolición del acuario, sin que conste la realización de un estudio que aconseje esta decisión. Además, la inversión finalista, realizada por el Gobierno de Canarias fue de 751.265 euros, y el Ayuntamiento asumió la responsabilidad de su puesta en funcionamiento en el año 2002, por lo que la situación de deterioro del mismo es responsabilidad de los gobiernos de Mogán.
No consta en el expediente, documento alguno emitido por la Dirección General de Infraestructuras Turísticas, que autorice la demolición proyectada por Mogán, o que se manifieste en algún sentido, cuestión está muy importante, si tenemos en cuenta que el dinero público aportado, fue únicamente para la construcción de este edificio, añade NC.
NC solicitó a la alcaldesa de Mogán, en octubre de 2018, hace casi tres meses, copia del proyecto que quiere construir sobre los cimientos del acuario, para conocer el detalle y el alcance del mismo, pero hasta el día de la fecha no ha recibido nada. Además en el pleno, del mes de noviembre de 2018, la portavoz nacionalista, Isabel Santiago, preguntó por las declaraciones de Onalia Bueno a la prensa en las que expresaba que “apuesta por la renovación, ampliación y modernización de las instalaciones como única alternativa posible”así como que “la percha necesaria para darle cobertura en el planeamiento vigente sería en el nuevo Plan de Modernización de este núcleo turístico que incluirá una ficha dedicada al acuario”.
“Ahora los hechos ponen en entre dicho la veracidad de las palabras de la alcaldesa, que ha pasado de la rehabilitación a la demolición, sin importarle, parece, los mas de 700.000 euros de dinero público que se invirtió en el acuario”, señala la formación nacionalista.
NC respalda la propuesta de los empresarios, y aboga por la rehabilitación del edificio para que se convierta en un espacio cultural, ya sea museo, centro de desarrollo de actividades artísticas, que aporte valor añadido al importante destino turístico que es Playa de Mogán. La portavoz de NC Isabel Santiago, que calificó este expediente de “un pelotazo comercial sin precedentes en la historia del municipio”, espera que se estimen las alegaciones presentadas, y se reconsidere la propuesta, para que partiendo de posiciones de consenso y acuerdo entre todos los sectores implicados, se ejecute un proyecto que beneficie a todos.