Onalia Bueno: “Es inhumano tener a más de 300 personas tiradas en un muelle”
La alcaldesa de Mogán, Onalia Bueno, reclamó este lunes al Gobierno central una solución urgente a la precaria situación en la que se encuentran los 332 migrantes que actualmente aguardan en el muelle de Arguineguín a ser reubicados a otros espacios, afirmando que “es inhumano tener a más de 300 personas tiradas en un muelle”. Asimismo, denunció la falta de apoyos al municipio en la gestión de la crisis migratoria, e instó al ministro Escrivá, al delegado del Gobierno y a Ángel Víctor Torres a acercarse al puerto a comprobar en persona la alarmante situación.
La regidora, acompañada en rueda de prensa por el patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Arguineguín, Ricardo Ortega, señaló que el problema migratorio “debe ser resuelto por el Gobierno de España”, al que solicitó “un mando único que coordine la situación”. Explicó que el muelle acoge desde hace más de cinco días a 332 migrantes en 17 tiendas de campaña montadas por Cruz Roja, incluyendo a cinco mujeres y tres menores. La alcaldesa recordó que el muelle de Arguineguín es el puerto referencia para la llegada de pateras a Gran Canaria desde el 2005 y que no reúne las adecuadas condiciones sanitarias y de seguridad para que los migrantes pernocten ahí.
La preocupación de los vecinos de la localidad crece diariamente al constatar la pasividad del Ministerio de Migraciones conforme a se vuelve más tensa la compleja convivencia que resulta del día a día de los diferentes colectivos migratorios en la zona. La inquietud es palpable en el barrio, especialmente tras la huída del campamento en la madrugada de este lunes de tres migrantes, los cuales fueron encontrados posteriormente en la playa del Cura por la Policía Local. Los mismos habían sido sometidos previamente a un test PCR, sin conocer aún sus resultados, por lo que el suceso ha generado “inseguridad en la población”.
“Esta presión no se puede sostener”, indicó Bueno, recordando que en lo que va de año han llegado más de 4.300 migrantes a las costas canarias. Asimismo, la regidora lamentó la falta de coordinación con el Estado y consideró inadmisible que las instrucciones de la Secretaría de Estado de Inmigración sean mantener a los migrantes en Canarias, provocando una enorme presión social en el archipiélago.
La alcaldesa solicitó estar en la reunión que mantendrán a lo largo de esta semana el ministro Escrivá junto con el presidente Torres y el delegado del Gobierno para exponer la situación, a los que invita a acercarse al muelle a comprobar la problemática que ahí acontece desde hace días. Por otro lado, criticó que “a día de hoy no ha venido nadie a visitar este muelle”, y sugiere que la ministra Carolina Darias sería la persona ideal para gestionar la actual crisis migratoria que sufre Canarias, ejerciendo de nexo entre los diferentes Ministerios, la Delegación del Gobierno y la Comunidad Autónoma.
Igualmente, la regidora estima que existen otros espacios propiedad de los ministerios más apropiados y mejor acondicionados para acoger a los migrantes, a la vez que apunta que “si hubiese coincidido la crisis migratoria con la temporada turística sería un problema” para la imagen exterior del Archipiélago como uno de los principales destinos turísticos de Europa. Además, subrayó los problemas del Sistema Integrado de Vigilancia Exterior (SIVE) para detectar las pateras que llegan a las Islas, especialmente en los recientes episodios de Veneguera y Puerto Rico, los cuales han suscitado la inquietud de la población.
Bueno aseguró que tomará medidas de no hallar una solución tras agotar la vía institucional, y quiso agradecer a los vecinos y vecinas de Arguineguín su ejemplar comportamiento ante esta excepcional situación, reafirmándoles su total apoyo. También resaltó el esfuerzo de todos los organismos implicados en la atención a los migrantes, como Protección Civil, Policía Local, Cruz Roja, otras ONG y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La inquietud del barrio marinero fue compartida por Ricardo Ortega, que incidió en que existe “un problema grave y necesitamos una solución” y en que “nos hemos sentido solos y abandonados”.