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Trabajadores de la Cadena Dunas protestan por las condiciones laborales y exigen respeto a sus derechos

Personal de la Cadena Dunas, muchos de ellos residentes en el municipio de San Bartolomé de Tirajana, se ha concentrado hoy, viernes 15 de noviembre, en las puertas del Hotel Mirador Maspalomas Dunas en Sonnenland para exigir mejores condiciones laborales y denunciar lo que califican como un trato “vejatorio, despectivo y discriminatorio” por parte de la dirección del establecimiento, perteneciente al Grupo Dunas.

Convocados por la Unión General de Trabajadores (UGT), los empleados y empleadas clamaron con fuerza consignas como “¡Los derechos no se venden!”, y “¡Que no nos mientan!”, en respuesta a lo que consideran una gestión marcada por la prepotencia y falta de consideración hacia su trabajo y bienestar. Además, exigieron que la cadena Dunas elimine actitudes de superioridad y cumpla con sus responsabilidades hacia quienes sostienen el día a día del hotel.

Entre las reclamaciones principales, los manifestantes exigieron condiciones laborales dignas, mejoras salariales y medidas de corresponsabilidad. También solicitaron un aumento en la contratación de personal para reducir las excesivas cargas de trabajo, así como una mayor atención a los riesgos laborales físicos y mentales que enfrentan en su trabajo diario. Otro de los puntos de conflicto es la presunta eliminación de derechos laborales y la falta de diálogo con los representantes de los trabajadores.

La protesta surge tras meses de tensión y promesas incumplidas, según el sindicato UGT, que advierte que, si no se producen cambios en la actitud de la empresa, continuarán las movilizaciones e incluso convocarán una huelga en la empresa. La concentración de hoy representa, según UGT, “el límite de la paciencia de un personal que ya no aguanta más”.

“Todo tiene un límite, ¡ya no aguantamos más!”, exclamaron los trabajadores, en referencia a las actitudes de ciertos “personajes” que, según los manifestantes, intentan imponer su visión sin conocimiento de la realidad laboral y organizativa del hotel. La UGT destacó que estos directivos, que carecen de experiencia en gestión hotelera, están afectando negativamente la relación con el personal y la calidad del servicio.

La movilización finalizó con el grito de “¡Renunciamos a los honores, pero no a la lucha!”, un lema que refleja la firme intención de los trabajadores del Grupo Dunas de no rendirse hasta obtener el respeto y las condiciones que consideran justas. UGT se comprometió a informar sobre próximas convocatorias y mantener la presión hasta que se logren cambios reales en la política laboral de la empresa.

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