NC adelanta que el rechazo a la reforma turística deja a Gran Canaria con menos capacidad para competir
El presidente de Nueva Canarias (NC), Román Rodríguez, dijo esta semana que si CC y el PSOE rechazan la reforma turística del Cabildo deja a Gran Canaria “con menos capacidad” de competir con el resto de las islas y con otros destinos. El también portavoz parlamentario de NC consideró que se sentará un “grave precedente” si los socios del pacto y el Gobierno de Canarias “niegan el derecho” a debatir y tramitar la iniciativa legislativa del Cabildo de Gran Canaria, registrada en el Parlamento canario, en el ejercicio de las competencias otorgadas por el Estatuto de Autonomía a las corporaciones insulares.
A la negativa, expresada en los medios de comunicación, del Ejecutivo y los grupos parlamentarios de CC y el PSOE que lo sustentan, a que se tome en consideración y se tramite la Iniciativa Legislativa en Orden a la Modificación Parcial de la Ley 2/2003, de 29 de mayo, de Renovación y Modernización Turística de Canarias; Rodríguez respondió que será “inaceptable para la mayoría social y política” de Gran Canaria.
El 72,4% de los representantes institucionales de la isla, los sectores económicos y laborales implicados y el plan insular territorial y turístico, aprobado por unanimidad, según el presidente de NC, amparan y apoyan que Gran Canaria pueda “superar el déficit” que tiene en camas turísticas de cuatro estrellas.
Pero además, los turoperadores, los clientes y los inversores “demandan” este tipo oferta. En opinión de Rodríguez sería “incalificable”, que se negara este modelo, ya que “condenaría” a Gran Canaria a “no crecer por la franja de servicio reclamada” por el sector.
“Sin este crecimiento” de camas turísticas de cuatro estrellas, “permitidas con límites cualitativos y cuantitativos”, Gran Canaria se quedará “con menos capacidad de competir” con el resto de las Islas y con otros destinos, advirtió el presidente de NC.
Con la iniciativa legislativa del Cabildo de Gran Canaria, añadió, se presenta una “oportunidad para corregir el error” cometido por la Ley de Renovación y Modernización Turística. Si el Gobierno y CC y el PSOE no permiten su debate y tramitación, recalcó, se sentará “un grave precedente al negar el derecho” de los cabildos insulares, contemplado en el Estatuto de Autonomía, para promover iniciativas legislativas.