Misa, procesión y paella de 350 kilos de arroz en el día grande de las fiestas de El Tablero
Día de mucho culto y expresión de costumbres devotas en El Tablero este domingo, jornada en que se celebró el día principal de las fiestas en honor a la Santísima Trinidad. El pueblo se despertó con los acordes musicales de la Banda Isleña, encargada de la diana floreada por las diferentes calles. Hasta que a las 11.30 dio comienzo la misa, función religiosa de mayor relieve en estas fiestas, que presidió el sacerdote Juan Carlos Arencibia Suárez, párroco en la iglesia de San José Artesano, en Lomo Blanco, director espiritual del Seminario Diocesano y profesor del Instituto Superior de Teología de Canarias.
En templo registró una considerable asistencia de fieles y seguidores, estando también presente las autoridades municipales, con el alcalde de San Bartolomé de Tirajana, Marco Aurelio Pérez Sánchez, al frente de la comitiva.
Tras el oficio religioso se procedió a la procesión por el recorrido diseñado al efecto. Muchísimos fieles formaron parte del cortejo a las veneradas imágenes religiosas durante el recorrido, en el que también la Banda Isleña puso acordes musicales.
Paella popular
Tras la misa y procesión, la paella popular de El Tablero es uno de los actos más significativos de las fiestas. Casi toda persona que acude a las fiestas de la Santísima Trinidad tiene como paso obligado el de la degustación de la paella gigante que organiza la comisión de fiestas con la colaboración de cocineros de la Asociación Mojo Picón, y que es servida con la ayuda de miembros de la Asociación de Barman de Canarias, Asociación de Gobernantas y vecinos voluntarios de El Tablero, siempre dispuestos a que el festejo obtenga su mayor realce.
Una gran paella en la que se emplearon 350 kilos de arroz, 350 kilos de pollo, otros tantos de carne de cerdo, 100 kilos de pimiento verde, 100 kilos de pimiento rojo, 100 kilos de pimiento morrón, 150 kilos de langostino, 100 kilos de mejillón, 100 kilos de cebolla, 600 litros de caldo, 80 litros de majada, 70 kilos de ajo, 60 manojos de perejil y 150 kilos de choco. El alcalde de San Bartolomé de Tirajana mostró su colaboración a la hora de servir los platos a los vecinos y demás allegados.
Los actos de la mañana se cerraron con una verbena del solajero en la plaza, con los acordes de Paco Guedes.