Mogán renueva mesas interpretativas de la macroruta ‘Tamaranae: entre Riscos y Barrancos’
El Consistorio moganero ha sustituido las mesas interepretativas de Cruz de Mogán y El Piquillo por otras elaboradas con materiales más resistentes al paso del tiempo y la adversidad climática. Además, disponen de Código QR para acceder a la información del entorno natural donde se ubican en cinco idiomas. Ambos enclaves forman parte de la macro ruta ‘Tamarane: entre Riscos y Barrancos’, más de 30 kilómetros de senderos rehabilitados en el marco del proyecto europeo ECO-TUR para impulsar el ecoturismo y turismo activo.
Las mesas anteriores, con cerca de cuatro años de antigüedad, estaban bastante deterioradas debido al acusado sol, que progresivamente desgasta y cuartea las láminas sobre las que se imprime la información de interés para los y las senderistas. Ese motivo ha llevado al Ayuntamiento de Mogán ha sustituirlas por otras completamente nuevas, fabricadas con aluminio anodizado y vinilo de alta calidad, materiales que garantizan una durabilidad mínima de 15 años sin alteraciones de color en cualquier condición climática. Asimismo, constan de un tratamiento antivandálico, por lo que son resistentes a disolventes y ácidos.
La mesa interpretativa de Cruz de Mogán ofrece información sobre un elemento muy representativo del Valle de Mogán, conocida por el mencionado nombre o Cruz de la Fortaleza. Se encuentra en una importante bifurcación de caminos para los sendiristas y fue mandada a construir en 1899 en la cima de la montaña denominada ‘La Fortaleza’ en por la mujer del que fuera alcalde del municipio, Miguel Marrero, cuando este falleció. Cada año mandaba a enramarla por la festividad del Día de la Cruz, tradición que han continuado vecinos y vecinas.
Por otro lado, la mesa interpretativa El Piquillo hace referencia a la zona del mismo nombre situada a la falda de la Montaña de Tauro, sobre el barrio de Barranquillo Andrés. Desde allí se aprecia uno de los ejemplares del drago dracaena tamaranae más grande del sendero, y que da nombre a la macro ruta ECO-TUR. Esta especie vegetal es endémica de la isla de Gran Canaria, emparentada con el drago dracaena draco y otras especies de dracaena del este de África. Desde esta situación se observa, además de la cuenca del Barranco de Arguineguín, la Montaña de Tauro, Barranquillo Andrés, Soria, la Presa de Soria, los Llanos de Pedro Afonso, el Roque Nublo, etcétera.
Los y las senderistas encuentran en estas mesas información en tres idiomas, español, inglés y alemán. No obstante, el código QR permite acceder al contenido también en francés y portugués.
Estas no son las únicas mesas de los senderos que conforman la macro ruta, que cuenta con otras instaladas por el Cabido de Gran Canaria. No obstante, el objetivo del Ayuntamiento es continuar incrementando y mejorando la señalización en el medio natural. Las dos nuevas mesas interepretativas han tenido un coste de 4.3998,81 euros con cargo el Plan de Sostenibilidad Turística en Destinos de Mogán, que se financia con fondos por el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia-Next Generation EU.