“Diego Tornel: ‘El vino canario es único y tiene una historia que contar”
Diego Tornel, reconocido recientemente como el Mejor Sumiller de Canarias, se ha consolidado como un referente en el mundo de la enología. En una conversación distendida, Tornel compartió su experiencia, el estado actual de la sumillería en Canarias y sus recomendaciones para disfrutar del vino en estas fiestas.
Diego, quien ya había sido finalista en ediciones anteriores del Concurso de Sumilleres de Canarias, alcanzó el primer lugar en esta tercera edición, destacándose entre una sólida competencia. “Es un orgullo representar a Canarias en este sector, donde hay grandes profesionales defendiendo nuestra gastronomía y nuestros vinos únicos”, afirmó.
Un defensor del vino canario
Para Tornel, la enología canaria es especial por su historia y las condiciones únicas de las islas. “Desde el siglo XV tenemos cultura vitivinícola. Nuestros vinos reflejan la mineralidad y frescura de nuestros suelos volcánicos y microclimas, lo que los hace irrepetibles en cualquier otra parte del mundo”, explicó mientras presentaba un tinto de Bandama, de Gran Canaria.
Además, destacó la creciente aceptación y exportación de los vinos de las islas, aunque lamentó la limitada producción que dificulta su disponibilidad local. “Muchos de los mejores vinos canarios salen al exterior y son verdaderas joyas enológicas”, señaló.
Impacto del cambio climático y sostenibilidad
El cambio climático, según Tornel, ya está afectando a la viticultura, tanto en Canarias como a nivel global. Sin embargo, también se están abriendo nuevas oportunidades. “Regiones como el sur de Inglaterra, que antes no podían plantar viñas, ahora producen espumosos comparables a los de Champagne”, comentó. En Canarias, algunos enólogos están adoptando prácticas sostenibles, como la creación de ecosistemas con sombra para proteger los viñedos.
Recomendaciones para esta Navidad
De cara a las fiestas, Diego recomienda apostar por vinos ligeros y de baja graduación alcohólica, ideales para acompañar los momentos navideños sin saturar el paladar. “Un buen ejemplo es el vino de Vandama, fresco, mineral y fácil de beber”, sugirió. También alentó a explorar espumosos canarios, como los de Alto de Trevejo o los ancestrales de Tiempos del Sur, y sidras secas como la de Valleseco.
El arte de ser sumiller
El papel del sumiller, según Tornel, trasciende la selección de vinos. Es un puente entre el consumidor y la historia detrás de cada botella. “Nuestra labor incluye gestionar la bodega, ofrecer experiencias únicas con vinos, destilados o incluso tés, y garantizar que el cliente disfrute de algo especial”, explicó.
Diego también destacó el crecimiento de la sumillería en Canarias, aunque reconoció la necesidad de más formación y concursos que impulsen la profesión. “Participar en certámenes es una forma de aprender y mantenerse actualizado sobre lo que se espera a nivel internacional”, señaló.
Planes para 2025
El próximo año será intenso para Diego, quien competirá en el Concurso Nacional de Sumilleres y en eventos como Madrid Fusión, donde representará a Gran Canaria. Además, participará en iniciativas como maridajes innovadores con picante, rompiendo reglas tradicionales de la enología.
Con su pasión y compromiso, Diego Tornel no solo lleva el vino canario a nuevas alturas, sino que también inspira a otros a descubrir y valorar las riquezas enológicas de las islas. Como él mismo afirma: “El vino es cultura, historia y emoción, y Canarias tiene mucho que ofrecer al mundo”.
