El Cabildo presenta una estrategia integral con 16 rutas ciclistas para hacer de Gran Canaria una isla conectada y segura
Gran Canaria posee excelentes condiciones para disfrutar de la bicicleta todo el año, sea como deporte, ocio o medio de transporte, para lo que Cabildo encargó un estudio que establezca los parámetros técnicos comunes que permitan una implantación homogénea que convierta Gran Canaria en un isla conectada y segura, una estrategia integral que propone la creación de 11 rutas deportivas, 4 rutas cicloturistas y la vuelta a la isla en 20 tramos mixta.
El presidente del Cabildo, Antonio Morales, presentó el documento de Bases y Criterios para el Desarrollo Insular de la Bicicleta en Gran Canaria junto al consejero de Energía, Raúl García Brink, y el experto ingeniero autor de la estrategia, el reconocido Manuel Calvo, quien aseguró que “la potencia de esta orografía es increíble, nada que envidiar a los puertos de los Pirineos ni los Alpes”.
Las propuestas estrella en este sentido son precisamente las ascensiones a puertos de montaña como la subida a la Cruz de Tejeda por Firgas, la ruta del Barranco de Ayagaures, o la subida a Los Giles, en las que es fundamental gestionar la coexistencia con el tráfico de vehículos y establecer una buena señalización que identifique la ruta con señales de inicio y final.
Las rutas deportivas o de carretera son las que revisten mayor dureza y son aptas únicamente para personas con conocimiento y experiencia en la práctica de este deporte y que cuentan con el equipamiento adecuado.
También destaca la ruta de vuelta a la Isla, que ya existe en la actualidad, pero que debe ser mejorada para que pueda ser recorrida con seguridad durante todo el año con un diseño de 20 tramos, aunque esta ruta no se considera únicamente deportiva, sino también una ruta cicloturista, ya que puede ser utilizada por los ciclistas desde un punto de vista más relajado de ocio y turismo.
El estudio recoge las características que debe tener una ruta cicloturista, como tener poca pendiente y conexión a zonas de interés paisajístico o recreativo, estar bien señalizada, sobre todo en las zonas compartidas con el tráfico, y contar con miradores, zonas de parada o puntos de agua bien identificados.
Ejemplos de rutas cicloturistas que tiene Gran Canaria, pero que necesitan de mejoras en su señalización y gestión del tráfico, son las del Ruedo de Ayagaures, que discurre entre Maspalomas y Ayagaures, la del Pinar del Tamadaba, entre Tejeda y Artenara, y la ruta de Ruedo Alto, que al ser circular comienza y finaliza en Tejeda.
Además, el experto explicó que existe otro tipo de rutas al que prestar atención: las rutas de montaña que, recoge el estudio, deben ser preferentemente circulares. En este caso, se debe determinar su dificultad técnica y tener previstos los accesos adecuados para vehículos por ser el medio más frecuente para acceder a ellas. Estas rutas también deben estar señalizadas con balizas que aporten información de interés al ciclista como los desniveles, al igual que el resto de las rutas.
La bicicleta como medio de transporte
El estudio también hace hincapié en el uso de la bicicleta como medio de transporte urbano, para lo que identifica como ámbitos idóneos la capital grancanaria y la zona de Vecindario, Arinaga, Aeropuerto de Gran Canaria, así como el Valle de Jinámar, Telde, Maspalomas y Valsequillo.
Uno de los aspectos fundamentales como transporte urbano e interurbano es la gestión del tráfico y también la relación entre la bicicleta y el transporte público, ya que la combinación de guaguas y desplazamientos en bicicleta permite, por ejemplo, que el radio de acción de las paradas se incremente desde los 500 metros andando hasta los dos o tres kilómetros en bicicleta.
Esto supone que se pueda disminuir drásticamente el número de paradas para dar servicio a la misma población, lo cual es muy indicado sobre todo en áreas urbanas y metropolitanas con poco movimiento. Además, estacionar bicicletas en una estación o nodo intermodal es más fácil y barato con respecto a cualquier otro medio de transporte.
Esta realidad ha llevado a acuñar el concepto de la “triple alianza” para la sostenibilidad en la movilidad, que estaría determinada por una combinación eficaz entre el peatón, la bicicleta y el transporte público.
El medio de transporte más eficiente
En pleno siglo XXI, en el que es evidente el uso abusivo del coche, la bicicleta se considera una de las soluciones más sostenibles y fáciles de aplicar. No solo es el medio de transporte más eficiente que existe, ya que aproximadamente el 90 por ciento de la energía que se aplica al pedal se transforma en movimiento, sino que al ser rápido, cómodo y barato también se torna la fórmula más conveniente desde el punto de vista personal.
Por eso, la bicicleta es una de las soluciones más efectivas ante la insostenibilidad de sistema de movilidad actual y el documento presentado supone un paso más en la estrategia del Cabildo de convertir Gran Canaria en una ‘ecoisla’.
Políticas comunes
El uso cada vez más creciente de la bicicleta ha provocado que muchos municipios hayan comenzado a implantar redes ciclistas e incluso a regular su uso, aunque de manera individual y con independencia de las medidas adoptadas por otros ayuntamientos.
En ese sentido, la estrategia tiene en cuenta la circulación entre municipios y ayudará al Cabildo a emprender las acciones necesarias para planificar una red de transporte coherente y conectada, sin interrupciones de un municipio a otro, bien señalizada y con aparcamientos suficientes, entre otras características, e incluye hasta una ordenanza municipal tipo para aquellos que la quieran adoptar.
Permitir que los usuarios puedan subir bicicletas plegables a las guaguas, señalizar correctamente las vías o adaptarlas al uso compartido con los vehículos, que las propias administraciones públicas tengan un parque móvil de bicicletas, son algunas de las propuestas que el Cabildo impulsará en los próximos años de manera gradual.