La Casa de Colón muestra belenes europeos en una exposición que recoge la diversidad del nacimiento navideño
Una exposición que pone en valor la diversidad de estilos y modos de representación del tradicional belén en diversos países y regiones europeas durante la época navideña, se inauguraba en la Casa de Colón el pasado día 12 de diciembre.
‘Nacimientos de Europa’, que organiza la Asociación de Belenistas Canarios ‘Lo divino’ y Casa de Colón, reúne más de una treintena de nacimiento pertenecientes a cinco colecciones privadas de Canarias que permite recorrer distintos países que a lo largo de la geografía europea han representado el Nacimiento de Jesús. Los ejemplares, que proceden de Alemania, Croacia, España, Grecia, Inglaterra, Holanda, Italia, Polonia, Portugal, República Checa, Rumanía, Rusia, Suecia, Turquía y Ucrania, podrán contemplarse hasta el próximo día 5 de enero en el mencionado museo americanista situado en el barrio fundacional de Vegueta.
Con entrada gratuita, la muestra ‘Nacimientos de Europa’ puede visitarse de lunes a viernes, de 10:00 a 21:00 horas, así como los sábados, de 10:00 a 18:00 horas y los domingos, de 10:00 a 15:00 horas. El museo permanecerá cerrado los días 24, 25, 31de diciembre y el 1 enero de 2020.
La colaboración de la Casa de Colón con la Asociación de Belenistas ‘Lo Divino’ comenzó en 2010 con la exposición ‘Oro, Incienso y mirra’, que exhibía distintos modos de representación de la epifanía en Canarias. A esta muestra siguieron en los sucesivos años, exposiciones de nacimientos de América, África, España y del Mundo, incluyendo una edición, la de 2014, dedicada exclusivamente a la figura del niño Jesús.
Historia de los belenes
Los portales de Belén son comunes desde los inicios de la cristiandad, en las catacumbas en Roma, iglesias y otros lugares relacionados con el culto religioso cristiano. Se atribuye a San Francisco de Asís la primera la primera escenificación de la Navidad en 1223, en una cueva próxima a la ermita de Greccio, en Italia. El ejemplo fue seguido por Santa Clara, que se encargó de difundirlo por los conventos franciscanos y extenderlo por toda Italia.
Sin embargo, el origen de los belenes, expresiones gráficas del acontecimiento religioso por medio de figuras, resulta “batallado”, ya que los napolitanos se sienten los creadores de esta tradición: algunos documentos refieren que el primer pesebre fue realizado en la Iglesia de Santa María del Pesebre en Nápoles, ya en el año 1.025, 198 años antes de que lo hiciese San Francisco. A raíz de eso, la tradición de los belenes se difundió velozmente en toda Nápoles y su provincia.
Con el tiempo, las simples y toscas representaciones de la Sagrada Familia se fueron ampliando con otros personajes bíblicos y profanos, escenas históricas y costumbristas. En el s. XVI aparecieron las primeras figurillas de barro vestidas con trajes de esa época.
Fue en 1759 cuando María Amalia de Sajonia, esposa del rey Carlos III de España, que reinaba también en Nápoles, mandó traer un nacimiento de Nápoles, donde había vivido desde que tenía 14 años, y lo instaló en el Palacio del Buen Retiro para solaz de su hijo, el futuro Carlos IV. Enseguida arraigó la moda, primero entre la nobleza, luego entre la burguesía y acabó implantándose en toda la sociedad española, desde donde pasó a América y Filipinas.
Las características de los portales de Belén varían y presentan rasgos propios dependiendo del país de procedencia. Les invitamos a disfrutar de esta exposición donde pueden admirar Nacimientos de países distintos como Italia, Portugal, Alemania, Rusia y Polonia entre otros.
