Gran Canaria contará con un edificio de servicios esenciales en 2026
- El Gobierno coloca la primera piedra del edificio de servicios esenciales en Gran Canaria
- El proyecto consta de dos edificios gemelos en cada una de las islas capitalinas que funcionan como uno solo y garantizan la prestación de los servicios de emergencias y atención 24/7 en Canarias
- La obra tendrá un plazo de ejecución de 24 meses y supondrá un hito en las edificaciones administrativas a nivel mundial
- Un bloque fabricado a partir de ceniza del volcán Tajogaite formará parte del edificio como símbolo de la resiliencia ante la adversidad de todos los canarios
El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha presidido este lunes el acto de colocación de la primera piedra del futuro edificio de servicios esenciales en Gran Canaria, uno de los dos edificios gemelos que el Gobierno de Canarias destinará a garantizar los servicios de emergencias y atención 24/7 de la población de las islas. Durante el acto protocolario, señaló que este proyecto “responde a una necesidad que nos hará situarnos a la vanguardia de la gestión de las emergencias, la seguridad y la atención a los canarios y canarias”.
Asimismo, subrayó que es también “una muestra de compromiso con lo público, dirigido a prestar la mejor atención posible a la ciudadanía y colocándola en el centro del sistema”.
El acto simbólico contó con la asistencia del vicepresidente del Gobierno y consejero de Economía, Industria, Comercio y Autónomos, Manuel Domínguez, la consejera de Hacienda y Relaciones con la Unión Europea, Matilde Asián, el presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, el alcalde de Telde, Juan Antonio Peña, y los directores generales de Emergencias, José Juan Marrón, y de Seguridad, David del Pino.
El proyecto del arquitecto Fernando Menis tendrá un coste conjunto de 79,4 millones de euros para ambos edificios que se financiará con recursos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, dentro del Programa Operativo FEDER 2021-2027. La UTE adjudicataria de la construcción, constituida por Acciona Construcción, Lopesan Asfaltos y Construcciones, Satocan y Contratas y Servicios Bahillo, contará con un plazo de 24 meses para su ejecución.
Con esta infraestructura se consigue aglutinar en dos edificios idénticos, eficientes y sostenibles, todos los servicios de seguridad, emergencias y atención 24/7 de la comunidad autónoma, y evitar la dispersión actual de instalaciones. Además, aunque se trata de dos edificios gemelos en cuanto a diseño, tecnológicamente funcionan como uno solo (edificios espejo) para facilitar la operatividad y garantizar su funcionamiento, ya que ambas infraestructuras podrán servir de respaldo una de la otra. Es la primera vez que una administración pública construye una infraestructura de estas características de seguridad.
El edificio ubicado en Jinámar (Telde) dispondrá de una superficie construida de 23.000 metros cuadrados, repartidos en dos sótanos, 4 plantas y una cubierta donde se situará el helipuerto. Su diseño también ha previsto la capacidad de hacer frente a situaciones excepcionales de índole sísmica y vulcanológica, o las derivadas de fenómenos meteorológicos adversos. Los edificios están dimensionados para que en 2030 puedan trabajar 550 personas en cada uno de ellos con una autonomía de funcionamiento, en caso de necesidad, de siete días.
Entre los servicios que albergará se encuentran el centro de información y atención ciudadana 112, Infosalud 061, los centros de control de seguridad y emergencias (emergencias sanitarias, Protección Civil, Bomberos, Unidad Militar de Emergencia, Salvamento Marítimo o Policía Canaria, entre otros), el teléfono de información 012, el cibercentro, los teléfonos de teleasistencia social y los centros de protección de datos del Gobierno de Canarias. El edificio de Santa Cruz tendrá las mismas dimensiones y distribución.
Cenizas del Tajogaite
Como primera piedra se ha querido utilizar un bloque de construcción fabricado con cenizas del volcán Tajogaite. La catástrofe que se vivió en la isla de La Palma ha sido una de las situaciones más difíciles de la historia reciente de Canarias y supuso un desafío para todos los servicios de emergencias implicados que, afortunadamente, se salvó sin tener que lamentar víctimas humanas. Además, el material obtenido a partir de la ceniza ha demostrado una resistencia enorme por lo que formará parte para siempre del edificio como ejemplo y símbolo de la resiliencia ante la adversidad de los palmeros y, en general, de todos los canarios.