El Gobierno de España declara la contingencia migratoria en Canarias, Ceuta y Melilla
La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, anunció este viernes la activación de la contingencia migratoria extraordinaria en Canarias, Ceuta y Melilla. La decisión responde a la saturación de los sistemas de acogida de menores migrantes no acompañados y activa el protocolo aprobado en el Consejo de Ministros del 22 de julio.
¿Qué se ha declarado y por qué?
El Ministerio de Juventud e Infancia ha declarado la contingencia migratoria extraordinaria en las tres autonomías al constatar que superan en más del triple su capacidad ordinaria de acogida, requisito establecido en el Real Decreto-ley 2/2025.
La medida busca garantizar los derechos de miles de niños y niñas migrantes no acompañados actualmente acogidos en Canarias, Ceuta y Melilla, territorios que habían solicitado formalmente la aplicación de este mecanismo excepcional.
¿Cuándo entra en vigor?
La declaración se ha realizado este viernes, 29 de agosto de 2025, y desde ese momento queda activado el protocolo aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 22 de julio.
¿Qué implica la activación del protocolo?
El artículo 5 del Real Decreto establece los procedimientos para la reubicación y traslado de menores migrantes no acompañados a otras comunidades autónomas, en el marco del Plan de Respuesta Solidaria.
El artículo 6 recoge las actuaciones necesarias para dar cumplimiento a dichas previsiones, garantizando la coordinación con las administraciones implicadas y la protección de los derechos de la infancia migrante.
¿Quién lo anunció y cómo se justificó?
La ministra Sira Rego explicó que la medida es el resultado de “meses de trabajo” y agradeció a la sociedad canaria, ceutí y melillense “el trato ofrecido a la infancia migrante”. Subrayó además que, pese a los intentos de bloqueo de algunos territorios, España “se sitúa a la vanguardia en la garantía de derechos de la infancia migrante”.
Un paso hacia la solidaridad nacional
Con esta declaración, el Gobierno de España activa un marco que permite repartir de manera más equilibrada la acogida de menores migrantes en todo el territorio nacional. La medida busca aliviar la presión en Canarias, Ceuta y Melilla, territorios especialmente afectados por los flujos migratorios en el Mediterráneo y el Atlántico.
