Los vecinos de Castillo del Romeral acusan a Marco Aurelio Pérez de “darles la espalda”
Falta de seguridad en las calles, escasez de viviendas, empleo y formación “completamente olvidados”, ausencia de actividades culturales y deportivas para mayores y niños. Así describen el día a día los vecinos del Castillo del Romeral quienes acusan al alcalde de San Bartolomé de Tirajana, Marco Aurelio Pérez, de “darles la espalda”.
El secretario local de Coalición Canaria en San Bartolomé de Tirajana, Alejandro Marichal, se reunió recientemente con los vecinos del barrio marinero para conocer las condiciones en las que viven. La visita se enmarca dentro del Plan de Barrios, una iniciativa que tiene como objetivo conocer y proponer mejoras en las infraestructuras y servicios de los barrios del municipio.
Durante la visita al barrio Marichal ha constatado la realidad en la que viven los vecinos “se levantan a las 06:00 de la mañana con los ruidos de los camiones y de las fábricas que se sitúan a escasos metros de las viviendas, deben trasladarse a otros municipios (aquellos que cuentan con vehículo propio, pues no existe un transporte colectivo que facilite el traslado) para que sus hijos puedan realizar alguna actividad extraescolar o deportiva, no cuentan con presencia policial en las calles y las infraestructuras públicas, como los parques o las piscinas naturales, no disponen de un mantenimiento que facilite el uso correcto de las mismas”. Marichal asegura que si bien el estado de los barrios más periféricos del municipio no gozan de buena salud, en el caso del Castillo del Romeral la situación “es especialmente sangrante”.
Por estos motivos Marichal exige a Marco Aurelio Pérez que se interese por la población de este barrio a los que parece que considera “vecinos de segunda” al no ofrecer las garantías mínimas que debe recibir cada ciudadano del municipio como son seguridad, vivienda, empleo y formación, entre otros.
Los vecinos expusieron al secretario local del partido nacionalista en el municipio sureño que están “hartos” de que durante cuatro años “no se haya visto ni si quiera a un técnico del ayuntamiento que se acercase al barrio a atender las demandas que presentan en el consistorio a través de la asociación de vecinos, sólo se les ve en el pueblo cuando se acercan las elecciones y no se cortan, vienen a pedir el voto”, asegura uno de los vecinos.
Alejandro Marichal propone acabar con la falta de conectividad con el barrio, al que solo se puede entrar o salir con vehículo privado, “la falta de comunicación aísla a los vecinos, especialmente a mayores y jóvenes, que se ven condenados a hacer vida exclusivamente en la zona en la que residen”. Por otro lado, añade, es necesario dotar al barrio de una zona industrial donde ubicar las distintas fábricas que se sitúan cercanas a las viviendas, así como fomentar la promoción pública de vivienda, el empleo, la formación y mejorar las zonas e infraestructuras públicas. “Si el Castillo del Romeral fuese más querido por su alcalde, el barrio podría ser un lugar de visita para los millones de turistas que anualmente recibe Maspalomas, pero la desidia y falta de interés han condenado a este barrio al olvido”, sentencia Marichal.
